En España, la idea de que los millonarios nacen ricos por herencia está cambiando, o al menos eso es lo que dicen los distintos datos y análisis. Cifras recientes muestran que en España se han incrementado el número de millonarios «hechos a sí mismos«, arañando espacio a quienes han heredado su fortuna. Sin embargo, como en tantos aspectos, los datos pueden contar diferentes realidades.
Millonarios en España según UBS y Forbes. El informe ‘Billionaire Ambitions Report 2024’ elaborado por el banco suizo UBS, revela que el 44% de los multimillonarios en España han creado su fortuna a partir de su propio trabajo o inversiones.
Sin embargo, esta cifra contrasta con los datos publicados por Forbes, que muestran que cerca del 74% de los grandes millonarios en España son ricos gracias a las herencias que han recibido de su familia, dejando en solo el 26% a quienes la habrían conseguido por méritos propios.
Ricos o muy muy ricos: esa es la diferencia. Entonces, ¿qué dato es el correcto, el de UBS o el de Forbes? La respuesta corta es ambos, porque la diferencia está en el tipo de millonario analizado y el tamaño de la muestra. Forbes se centra solo en milmillonarios (con patrimonios de miles de millones de euros), mientras UBS incluye a millonarios con patrimonios más altos, pero no necesariamente en la cúspide global.
Según los datos del estudio de Charles Schwab se necesitan 2,3 millones de dólares para ser considerado como una persona rica. Pero para ser considerado como un UHNWI (Ultra High Net Worth Individuals) o personas con un patrimonio disponible para invertir de más de 30 millones de dólares. En función de dónde se coloque ese umbral, los porcentajes también cambian.
Herederos y fortuna propia. Si se toma en cuenta solo a quienes tienen más de 30 millones de dólares para invertir (los UHNWI), el porcentaje de millonarios españoles que han heredado su fortuna baja hasta el 14% que señalaba UBS. Este porcentaje también coincide con el dado por el estudio de Jonathan Wai y David Lincoln en el que se analiza la naturaleza de las fortunas en todo el mundo.
Según los datos de este estudio, en España el 38,4% de los millonarios han recibido una herencia y han multiplicado ese dinero a través de inversiones o proyectos propios, creando una nueva fortuna a partir de una base financiera previa, mientras que el 47,5% ha logrado construir su riqueza sin recibir una herencia significativa.
Estas cifras muestran que la meritocracia entre los millonarios existe, pero añade el matiz de que, en muchos casos, esa fortuna es el resultado de una combinación entre herencia y esfuerzo personal.
No lo llames meritocracia: llámalo entorno. A la hora de crear una nueva fortuna no todo se reduce a heredar dinero, sino que también depende en buena medida del entorno social y las oportunidades que ofrece el nacimiento en una familia adinerada. Tener acceso a contactos, educación preferente y apoyo económico aumenta las probabilidades de éxito, incluso para aquellos considerados «hechos a sí mismos».
Según un informe del Observatorio Social de la Fundación La Caixa, se tardan cuatro generaciones en ascender de una situación de pobreza a clase media. El informe ‘To Have and Have Not – How to Bridge the Gap in Opportunities’ elaborado por la OCDE, señala que el entorno socioeconómico de los padres contribuye hasta en un 75% la definición de las oportunidades de sus hijos. Es decir, un joven nacido en el seno de una familia acomodada tiene más oportunidades у soporte económico para iniciar proyectos—que pueden ser un fracaso, pero también un éxito rotundo— que un joven con pocos recursos. Ese respaldo familiar también debe tenerse en consideración al etiquetar las fortunas «hechas a sí mismas». Aunque no por ello se desmerece el mérito.
Imagen | Unsplash (Shane)