En The Acolyte, la Fuerza será sin duda uno de los elementos esenciales para comprender su argumento. En específico, porque en gran parte de la trama, la Orden Jedi — sus costumbres y tradiciones — tendrá una especial relevancia. Por primera vez en el Canon cinematográfico y televisivo live-action de la saga, el escenario de la historia será la Alta República. Lo que asegura una perspectiva novedosa acerca de los caballeros del sable de luz. Pero más que eso, una enfocada en su momento de mayor esplendor, poder e influencia política. 

Como se recordará, la Alta República fue el momento en que los Jedis tuvieron una mayor relación con Coruscant y la Cancillería del sistema democrático galáctico. Lo que permitió a la Orden prosperar y convertirse en un punto de considerable poder dentro de la configuración política de la alianza planetaria. También es la época, en que la capital de la República se convirtió en el lugar con el mayor templo Jedi del cosmos. Esta centralización se volvió, con el transcurrir de los siglos, en el epicentro del poder de la orden, en detrimento de otros tantos en diferentes planetas. 

En medio de toda esta complicada organización que se extiende a lo largo de milenios, la Orden Jedi estratificó la forma en que sus miembros colaboran con el Templo. Mucho más, en la manera en que ese trabajo, tiene relación tanto con sus intereses como las responsabilidades que ejercen con respecto al resto de sus hermanos en la Fuerza. Lo que permitía a los caballeros desempeñarse en un grupo organizado, para beneficio del bien general y a la vez, de la propia estructura a la que pertenecían.

Los tipos de Jedi que vemos en The Acolyte

Debido a lo anterior, la vida de los Jedis no se limitaba a seguir los preceptos de las tradiciones con respecto a la Fuerza. También, tenía un componente político y social, que permitía a la Orden extender su influencia — benigna y pacificadora — alrededor del cosmos. Las diferentes ocupaciones de los caballeros del sable láser, daban prioridad a las capacidades individuales. No obstante, también dependían del momento histórico y las necesidades del templo en los cuales se encontraban. 

Por lo que los jedis, podían ejercer tanto cargos diplomáticos, espirituales o de guía intelectual, como militares. Esa diversificación de la ocupación, brindó a los miembros de la Orden un amplio rango al momento de extender su influencia. En específico, durante la Alta República y la forma en que esta expandió su escenario en medio de la galaxia hasta el Borde Exterior. 

Tomando en cuenta lo anterior, en el Canon de Star Wars, existen tres tipos de Jedi. O al menos, los hubo durante sus momentos de mayor esplendor, organizados de tal manera que pudieran servir a la Orden, al mismo tiempo de encauzar sus habilidades y sensibilidades personales. Lo que dio como resultado una cuidada jerarquía que hizo del poder de la Orden, un punto a tener en cuenta en la toma de decisiones de la Alianza Galáctica. 

Cónsul Jedi

Llamado a la vez Vidente, este tipo de Jedi está entrenado para ser hábil en batalla, aunque puede ser que jamás entre en combate. Al contraste, dedica todo su esfuerzo y capacidad al estudio de los misterios de la Fuerza. Por lo que sus ocupaciones, van desde eruditos y sabios, a los que los más jóvenes pueden consultar. Así como también, diplomáticos y políticos de carrera. 

Usualmente, empuñaban un sable verde y dedicaba sus esfuerzos, al uso de sus habilidades para la resolución pacífica de conflictos. Si durante su vida llegan al rango de Maestro Jedi, recibían además el título de honor de Maestro Sabio. 

Guardián Jedi

Star Wars Jedi: SurvivorStar Wars Jedi: Survivor

La contraparte luminosa del Guerrero Sith, usa sus habilidades y talentos para la batalla. Pero en lugar de herir o dedicar esfuerzos en dañar, el Guardián Jedi empleaba su capacidad para enfrentar conflictos, por lo que trataba de evitar que estos se convirtieran en escaramuzas en escalada que pudieran amenazar la paz. 

Los guardianes empuñaban sables de luz azules, aunque no era una regla fija ni tampoco, debía ser obedecida más allá de la tradición. En las ocasiones en que un Guardián llegaba a ser Maestro Jedi, se le llamaba también Maestro Guerrero, uno de los protagonistas de The Acolyte.

Ver fuente

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *