Cosechar un millar de indiscutibles para cualquier pelotero profesional, representa un logro significativo, indica consistencia productiva y éxito a la hora de acudir al plato por un período de tiempo relativamente considerable.
El pasado lunes en San Diego, Luis Arráez se unió a la lista de bateadores con al menos mil hits en 150 temporadas de Grandes Ligas, recopiladas desde 1876 hasta 2025.
Más de 23 mil jugadores ha actuado en la historia de la pelota mayor, según el portal digital baseballreference.com, y el yaracuyano, conocido como “La Regadera”, ocupa el puesto 1.398, como el último en alcanzar la apreciable cifra de un millar de imparables.
La noche del pasado lunes, en San Diego, ligó tres cohetes en cuatro visitas al plato, en caída de 4 anotaciones por 3 ante los Orioles, en lo que significó el 94° juego de al menos tres hits en su notable trayectoria de siete temporadas en la MLB.
De esta manera se convirtió en el cuadragésimo primer artillero venezolano que logra acumular como mínimo mil hits desde que Alfonso “Chico” Carrasquel apuntó su nombre como el primero de esa lista, el 7 de julio de 1957, con los Indios de Cleveland, en el segundo juego de una doble cartelera contra sus excompañeros de los Medias Blancas de Chicago.
El histórico indiscutible que le unió a la exclusiva lista del millar, lo dio en la parte baja del séptimo inning.
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Con un out, en cuenta de un strike y una bola, ante el relevista zurdo Dietrich Enns, descargó hit rodado por el centro del campo para completar su faena ofensiva de la noche.
Arráez es el segundo venezolano que requiere menor cantidad de encuentros para acumular el primer millar de imparables.
Lo hizo en 818 partidos, 32 juegos menos que los 786 que necesitó José Altuve en las primeras seis de sus 15 campañas con los Astros para imponer el registro de criollos.
Detrás de Arráez queda ahora Miguel Cabrera, quien también lo logró en sus primeras seis temporadas, pero se tomó 861 juegos para conseguirlo, 43 más que el de San Felipe.
Otras aspiraciones
Aunque lo que resta de calendario puede resultar su peor enemigo, pues a los Padres de San Diego solo le quedan 22 encuentros para completar la fase eliminatoria, las credenciales históricas de Arráez en el último mes de temporada regular sirven de respaldo a quienes estiman que todavía tiene chance para coronarse campeón bate por cuarta campaña consecutiva y de redondear su tercera temporada de al menos dos centenares de indiscutibles.
La actuación del día lunes permitió elevar el promedio a .285, 16 fracciones por debajo del líder y quedó a 47 hits de completar los doscientos.